Cómo mantener sanos a los niños en invierno
El invierno finalmente ha llegado y, lamentablemente, también la temporada de resfriados y gripe. Por este motivo, te queremos compartir estas recomendaciones para mantener sanos a los niños durante esta temporada de frío.
Dado que los niños son especialmente propensos a las enfermedades, deberás tomar medidas adicionales para mantener a tus hijos sanos este invierno.
Mejora su alimentación durante invierno
Intenta incorporar los siguientes alimentos en la dieta de su hijo este invierno:
- Carne de res: contiene zinc, que es vital en la producción de glóbulos blancos que tu hijo usa para destruir las bacterias.
- Las frutas que contienen vitamina C (naranjas, granadas, fresas y frambuesas) contienen una buena cantidad de esta vital vitamina.
- Ajo: contiene alicina, un compuesto que combate las bacterias y las infecciones.
- Yogurt que contiene probióticos: los probióticos mantienen el sistema digestivo libre de gérmenes que causan enfermedades.
Al igual que tu hogar requiere energía adicional para mantenerte caliente durante el invierno, el cuerpo de tu hijo necesitará nutrientes adicionales para combatir los virus y las infecciones cuando estos ataquen.
Limita el consumo de azúcar de los niños
Los meses de invierno están repletos de festividades que a los niños les encantan. Desafortunadamente, las festividades de invierno a menudo incluyen refrigerios azucarados que pueden causar estragos en el cuerpo de un niño.
El aumento del consumo de azúcar no solo deprime el sistema inmunológico, también causa inflamación sistémica.
Como resultado, los niños que comen mucha azúcar se vuelven candidatos probables para el resfriado, la gripe y más. Trata de limitar la ingesta de azúcar de los niños a una pequeña golosina por día para reforzar su sistema inmunológico.
Mantén a los niños hidratados
Un vaso de agua fría es probablemente lo último que los niños quieren durante el invierno, pero es lo que sus cuerpos necesitan para combatir infecciones y enfermedades.
El agua no solo transporta nutrientes a las células, sino que también elimina las toxinas del cuerpo. Por lo tanto, la deshidratación aumenta el riesgo de que un niño se enferme y aumenta la inmunidad durante el invierno.
Asegúrate de que los niños duerman lo suficiente
El sueño es esencial para un sistema inmunológico saludable: permite que el cuerpo se cure y se repare. Si no estás segura de cuánto necesitan dormir tus hijos, aquí hay una revisión rápida:
- Los bebés menores de 1 año requieren de 12 a 18 horas por noche.
- Los niños pequeños de 1 a 3 años necesitan entre 12 y 14 horas cada noche.
- Los niños en edad preescolar entre las edades de 3 y 5 requieren de 11 a 13 horas por noche.
- Los niños de 5 a 10 años necesitan entre 10 y 11 horas cada noche.
Con una mayor cantidad de gérmenes flotando alrededor, el cuerpo de tus hijos necesitará un poco de tiempo extra durante el invierno para recuperarse por completo.
Estos consejos para cuidar a tu hijo en invierno son sencillos pero efectivos, también te sugerimos que fortalezcas los esfuerzos con el aderogyl c infantil para reforzar las defensas de tus pequeños.